Un dulce asturiano buenísimo, me encantan..
Hubo en Oviedo, en los inicios del siglo XX, un Congreso Eucarístico y el gremio confitero ideó diseñar una dulcería que fuese recuerdo de ese evento; pensaron en unas pastas-galletas con forma de panecillos con un corte longitudinal y al hornear…......salió lo que salió. Los ovetenses, con su sorna tradicional los bautizaron y dieron por nombre "Coñinos". Don Alfredo Valdés, en la ya desaparecida confitería San Juan de Oviedo, fue el depositario de la receta y creó su último elaborador...
Ingredientes:
- 150 gr de mantequilla
- 190 gr de azúcar
- Azúcar glass (opcional..)
- 50 ml de leche (yo uso siempre desnatada..)
- Ralladura de limón (opcional, la auténtica receta no lleva..)
- 2 huevos
- Harina de repostería (la que admita, a mí me llevo 450 más menos..)
- Una pizca de sal
Elaboración:
En un cuenco ir poniendo todos los ingredientes, empiezo con los huevos, azúcar, la mantequilla (ha de estar pomada..) la leche, la harina y la pizca de sal, ir mezclando todo e ir echando la harina poco a poco hasta que quede una masa manejable y no se pegue a las manos, hacer una bola y dejar reposar media hora. Pasado ese tiempo precalentar el horno a 200º e ir formando bolitas más o menos del tamaño de una nuez, después se le da forma de bollito alargado, se colocan en la bandeja sobre papel de hornear, se les hace con un cuchillo afilado un corte longitudinal sin llegar al fondo (pero más profundo que el que yo hice para que se note más el corte..) meter al horno a 180º unos 20 minutos hasta que doren un poquito y listo.
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